1999, Número 4
Rev ADM 1999; 56 (4)
Editorial
Grego SE
Idioma: Español
Referencias bibliográficas: 0
Paginas: 136
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FRAGMENTO
Se encuentra todo listo para la gran fiesta del conocimiento odontológico, la Asociación Dental Mexicana, Federación Nacional de Colegios de Cirujanos Dentistas AC, y la Federación Dental Internacional conjugaron sus esfuerzos para que podamos compartir, aprender y disfrutar aunque sea por pocos días los avances más notables en ciencia y tecnología del mundo contemporáneo. Después de las dificultades ya superadas esperamos que el nombre de México se conserve como honorable y limpio y se certifique la excelencia y hospitalidad de la que somos capaces de brindar. Así las cosas, esperamos se incorpore más gente a la gran fiesta para que como decimos nos «salga mejor». Para el gran evento se nos tiene preparado una gran cantidad de conferencias, mesas clínicas, sesiones de pósters así como programas culturales sociales y deportivos que han sido coordinados para sacar el mayor provecho posible, es una verdadera lástima que no se pueda asistir a todo, fácilmente tomaría dos o tres semanas, y pues, hay que trabajar y obviamente practicar a la brevedad posible lo aprendido. Durante mucho tiempo ADM tenía deseos de participar en un evento de esta magnitud pues todavía se recuerda el anterior congreso de 1972 el cual fue un éxito rotundo y permitió el avance importante de la profesión en el país, ahora con las comunicaciones y difusión comercial ¿Tendrá el mismo impacto? ¿Será lo que nos presentarán lo que vuelva a hacernos mejorar aún más? ¿Lo nuevo e innovador de veras será mejor que lo que estamos haciendo? ¿Traen estas técnicas y materiales beneficios reales para los pacientes o para los bolsillos de los fabricantes y los nuestros? ¿Podremos atender con mejor cuidado a los pacientes? ¿De veras nos van a enseñar o ya todo lo sabemos? ¿Quién va a ganar en el golf? ¿Nos vamos a encontrar a los amigos que hace tiempo no vemos? ¿Vamos a hacer «grilla»? ¿Vendrá el Presidente de la República a la inauguración? ¿Vamos a caber en los auditorios? ¿A poco habrá ofertas en el Congreso? La verdad hay muchas preguntas y para conocer las respuestas sólo queda el ser testigo presencial de la historia asistiendo al gran evento, seguro valdrá mucho la pena, les esperamos.