2005, Número 3
Salud Mental 2005; 28 (3)
Evaluación del componente afectivo de la depresión: análisis factorial del ST/DEP revisado.
Agudelo D, Carretero-Dios H, Blanco PA, Pitti C, Spielberger C, Buela-Casal G
Idioma: Español
Referencias bibliográficas: 36
Paginas: 32-41
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RESUMEN
La depresión constituye uno de los principales problemas de salud pública, dada su alta prevalencia así como los costes que acarrean su intervención y tratamiento. Esto hace que cada vez sea más necesario identificar estrategias para su adecuada evaluación, que permitan realizar diagnósticos más precisos y útiles. No obstante, un primer obstáculo que se antepone a esta circunstancia es la falta de claridad conceptual en relación con los criterios para el diagnóstico, o más aún, con los que deben considerarse como síntomas característicos de la depresión. Esto es bastante evidente en las escalas de evaluación de la depresión, que se caracterizan por la amplia variedad de síntomas que es necesario evaluar, lo cual hace que se sobrevaloren algunas áreas frente a otras a las que se concede menor importancia en función del criterio teórico que acompañe la construcción de una escala. Así, la depresión se evalúa de acuerdo con el cuestionario que se emplea y obviamente, según el marco teórico que sustenta dicha herramienta. Esto explicaría la frecuente dificultad para identificar los síntomas comunes, al emplear varios instrumentos de evaluación y por ende, la dificultad para identificar los que podrían considerarse síntomas genuinos de la depresión.Con el objetivo de superar algunas de estas limitaciones, se presenta en este estudio el Cuestionario de Depresión Estado-Rasgo (ST/DEP), como una herramienta de gran utilidad tanto clínica como de investigación, por cuanto ofrece la posibilidad de evaluar uno de los componentes de la depresión, el componente afectivo, y ofrece dos medidas diferentes: rasgo y estado, lo cual también contribuye a diferenciar el problema de la intensidad frente a la frecuencia. Mediante un análisis factorial de ejes principales se muestra cómo el cuestionario identifica dos factores en la afectividad: la distimia (afectividad negativa) y la eutimia (afectividad positiva). La idea de medir la afectividad positiva obedece al interés por hacer más preciso el instrumento, en el sentido de que tras la inversión de la puntuación en los reactivos que miden la afectividad positiva, se puede obtener una medida de bajos niveles de afectación, aspecto que suele descuidarse en la mayoría de las escalas que solamente identifican la presencia o ausencia del factor que miden, pero que tienen dificultad cuando tratan de estimar modificaciones leves. Este elemento es de gran utilidad tanto en la clínica como en la investigación. En el aspecto clínico, por cuanto permite identificar cambios leves en la afectación, que pueden ser bastante importantes para medir la eficacia terapéutica y la remisión de los síntomas. En la investigación, porque la posibilidad de disponer de una herramienta capaz de diferenciar bajos niveles de afectación, permite hacer una valoración más precisa de la sintomatología depresiva, sobre todo cuando se trabaja con población no clínica.
El presente estudio se realizó con una muestra de 300 sujetos adultos jóvenes (103 hombres y 197 mujeres), con una media de edad en las mujeres de 21.82 y una desviación típica de 2.74. En los hombres la media fue de 22.26 y la desviación típica de 3.66. Se trata de un estudio instrumental y en él se utilizó como instrumento la Versión Experimental Castellana del Cuestionario de Depresión Estado-Rasgo (ST/DEP). La información se recabó después de informar a los participantes respecto al estudio y al carácter voluntario de su participación.
En los resultados que se presentan se diferencian las dos escalas (Estado/Rasgo), de acuerdo con las dos subescalas (distimia y eutimia). Se observa que existen diferencias entre los hombres y las mujeres, las que llegan en algunos casos a ser significativas. Las mujeres tienen mayor tendencia a obtener puntuaciones altas, lo cual corrobora la teoría de que es mayor la tendencia a la depresión, en las mujeres.
Con respecto a la estructura factorial, inicial, se identificó un factor principal en el cual se aglutinaron todos los reactivos con pesos superiores a 0.30 lo que pudo explicar el porcentaje de 54.13% de la varianza en las mujeres y de 53.25% en los hombres en la escala de estado (S-DEP), y de 54.53% para las mujeres y 53.35% para los hombres en la escala de rasgo (T-DEP). La rotación promax diferenció claramente dos factores: la distimia y la eutimia. La confirmación de la estructura bifactorial da cuenta de la capacidad de la escala para diferenciar la afectividad positiva y la negativa en la depresión, e indica la posibilidad de diferenciar cambios leves en la afectividad en la población no clínica.
Es importante indicar que el ST/DEP aporta la medida de un componente de la depresión: la afectividad, la que ha sido identificada como importante dentro de este trastorno; sin embargo, no basta por sí sola para diagnosticar la depresión. Esto es relevante, sobre todo porque muchos diagnósticos se basan en los criterios de los instrumentos de la evaluación, lo cual crea mayor confusión frente al diagnóstico diferencial, con la ansiedad y otros síntomas y entidades clínicas.
Los resultados anteriores demuestran las propiedades psicométricas del ST/DEP, y hacen de esta escala un instrumento útil para la evaluación de la depresión.
REFERENCIAS (EN ESTE ARTÍCULO)
22. Reyes-Ortega M, Soto-Hernández A L, Milla-Kegel J G, García-Ramírez A, Hubard-Vignau L, Mendoza-Sánchez H, Mejía-Garza L, García-Peña M C y Wagner-Echeagaray F A: Actualización de la Escala de Depresión del Centro de Estudios Epidemiológicos (CES-D). Estudio piloto en una muestra geriátrica mexicana. Salud Mental, 26: 59-68, 2003.