2014, Número 2
Mul Med 2014; 18 (2)
Verificación del diagnóstico y acciones de salud con pacientes débiles visuales. Jiguaní - 2013.
Batista MM, Sardiñas OGM, Castellanos BDF
Idioma: Español
Referencias bibliográficas: 10
Paginas:
Archivo PDF: 164.92 Kb.
RESUMEN
La pérdida o disminución de la visión constituye un importante problema de salud, pues ocasiona cambios psíquicos, sociales y laborales de quien la padece. Se realizó un estudio experimental en el municipio Jiguaní durante los meses de enero-junio del 2013, con el objetivo de verificar el diagnóstico de débil visual en los pacientes investigados en este municipio y realizar acciones de salud que ayuden a mejorar la calidad de vida de los mismos. El universo del trabajo estuvo constituido por 300 pacientes con un diagnóstico previo de débiles visuales y pertenecían a la ANCI. La muestra fue conformada por 228 pacientes que mantuvieron el diagnóstico de débiles, para incorporarlos a la sociedad recibieron el tratamiento adecuado según su discapacidad: tratamiento médico, quirúrgico, de rehabilitación visual en la consulta de baja visión. Se obtiene como resultado que los pacientes menores de 15 años el mayor porcentaje lo presentó el sexo masculino con 8 niños para un 0,04% y en los mayores de 15 años el mayor porcentaje fue también en el sexo masculino con 110 pacientes para un 0,5%, según defectos refractivos el más frecuente fue el astigmatismo según el tipo de tratamiento brindado, el más utilizado fue el tipo no óptico con 66 pacientes para un 0.29% y tratamiento óptico con 60 pacientes para un 0,26%, hipermetrópico con 122 pacientes para un 0,48% y la hipermetropía con 98 pacientes para un 0,43%, distribución de pacientes según el tipo de tratamiento brindado. En la distribución de pacientes según agudeza visual antes y después del tratamiento 94 pacientes (0.41%) tenían inicialmente una moderada afectación visual, luego de recibir el tratamiento solo 32 (0.14%) mantuvieron su déficit visual y 31 pacientes (0.01%) tenían severa disminución de la visión, después de el tratamiento solo 20 (0.09%) mantuvieron su afectación visual. Se comprobó el diagnóstico de débil visual en todos los pacientes estudiados, fue comprobada la agudeza visual inicial y final. Fueron realizadas acciones de salud con los pacientes finalmente diagnosticados.REFERENCIAS (EN ESTE ARTÍCULO)
Albóniga Morales L, Boffill Corrales AM, López Torres M, Gracía MuñozCL, Gómez Martinez N. Comportamiento clínico-epidemiológico de la baja visión en Pinar del Río, Cuba .Mayo de 2011-1012. Avances (Internet) 2008(citado 12 de Ene 2013) 10 (3) (aprox 9 p). Disponible en: http://wwww.avances.pinar.cu/No5202008-3/artículo.htm