2014, Número 3
Cir Cir 2014; 82 (3)
Tumor fibroso solitario hemangiopericitoma de localización atípica: importancia del estudio inmunohistoquímico
Soriano-Hernández MI, Husein-ElAhmed H, Ruíz-Molina I
Idioma: Español
Referencias bibliográficas: 12
Paginas: 323-327
Archivo PDF: 341.13 Kb.
RESUMEN
Antecedentes: el tumor fibroso solitario es un tumor poco común. Anteriormente se suponía que afectaba sólo la cavidad torácica, en especial la pleura; posteriormente, se relacionó con otras membranas serosas y se observó en diversas localizaciones extraserosas, entre ellas la piel. El conocimiento de este tumor, junto con el aspecto histológico característico y el patrón de expresión inmunohistoquímica con intensa positividad para CD34 permiten que cada vez se diagnostique con mayor frecuencia.Caso clínico: se comunica el caso de un varón de 43 años de edad con un nódulo indoloro en el pulpejo del primer dedo izquierdo, que sugería clínicamente un melanoma nodular o granuloma piógeno. Mediante biopsia excisional y estudio inmunohistoquímico se diagnosticó como tumor fibroso solitario.
Discusión: hasta la fecha se han publicado 11 casos de tumores fibrosos solitarios cutáneos, localizados en cabeza, mejilla, muslo, pecho, espalda y vestíbulo nasal. El caso que se comunica constituye la primera lesión de estas características que afecta la mano. El diagnóstico clínico diferencial del tumor fibroso solitario incluye otros tumores como: melanoma nodular, granuloma piógeno, tumor de células gigantes tenosinovial, fibroma y tumor de vaina de nervio periférico benigno. En cuanto a la histología, se planteó el diagnóstico diferencial con otras neoplasias que también expresan CD34.
Conclusiones: el tumor fibroso solitario deriva de células mesenquimatosas y expresa CD34, lo que explica su aparición en cualquier localización, como en este caso, que fue en el pulpejo del quinto dedo.
REFERENCIAS (EN ESTE ARTÍCULO)