2002, Número S1
Arch Cardiol Mex 2002; 72 (S1)
Estado actual del tratamiento farmacológico de las arritmias
Cárdenas M
Idioma: Español
Referencias bibliográficas: 11
Paginas: 35-38
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RESUMEN
Las arritmias son consecuencia de una alteración en las propiedades electrofisiológicas del corazón; la excitabilidad, el automatismo, la conducción, la refractoridad y la repolarización. Estas propiedades dependen del voltaje de la membrana celular que a su vez es una consecuencia, por un lado, de la existencia de túneles macromoleculares que a través de la membrana permiten el flujo de partículas cargadas eléctricamente y, por otro, de las llamadas bombas electrogénicas que movilizan iones contra gradientes electroquímicos utilizando energía. Las alteraciones en el voltaje de la membrana dan lugar a mecanismos arritmogénicos por alteraciones en el automatismo, que pueden ser por mecanismos normales o anormales y estos últimos a su vez por actividad disparada por postdespolarizaciones tempranas o tardías; o bien por trastornos de la conducción que producen re-entradas o movimientos de circo. El tratamiento medicamentoso de las arritmias debe basarse en un diagnóstico integral correcto, en el conocimiento del mecanismo desencadenante y mantenedor de la arritmia y un conocimiento adecuado de la farmacología de los antiarrítmicos, incluyendo la farmacodinamia y la farmacocinética que permita elegir aquél que actué sobre el parámetro vulnerable. Las clasificaciones de los antiarrítmicos, si bien pueden ser útiles desde un punto de vista didáctico, son poco útiles en la práctica y pueden aun resultar perjudiciales. En las arritmias supraventriculares, los mecanismos de producción son conocidos e identificables, se conocen las vías de re-entrada involucradas y sus propiedades electrofisiológicas que son normales, por lo que la respuesta a los fármacos es predecible. En contra posición, en las arritmias ventriculares, los mecanismos de producción son variables, los circuitos difíciles de identificar, y comprenden tejido sano y enfermo, lo que hace la indicación terapéutica muy difícil y muchas veces incorrecta, sobre todo si se toma en cuenta que existen cerca de 90 medicamentos antiarrítmicos. Es posible que las arritmias genéticamente condicionadas y que se comienzan a conocer y estudiar sean en el futuro una base firme para modificar la situación actual.REFERENCIAS (EN ESTE ARTÍCULO)