2019, Número 3
Con motivo del fallecimiento del doctor Pedro Lavalle Aguilar, reproducimos algunas palabras que sus alumnos y él mencionaron durante el homenaje que se le hizo en julio del año 2002 en el Diplomado de Micología Médica de la unam que llevó su nombre
Idioma: Español
Referencias bibliográficas: 0
Paginas: 212-213
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FRAGMENTO
“Como un reconocimiento permanente a una vida profesional y académica dedicada a estudiar y a enseñar la dermatomicología.”R. Arenas
“El doctor Pedro Lavalle es un personaje del que siempre
aprendemos y que tiene muchas facetas: como maestro,
como amigo, como consejero, siempre dando un aliciente,
y a veces todo lo contrario, cuando cree que nos lo
merecemos.”
M.C. Padilla
“‘Los signos esenciales de la juventud son tres: la voluntad
de amar, la curiosidad intelectual y el espíritu agresivo’
es una frase de Giovanni Papini que para mí define y
me hace totalmente concreto lo que sucede en la vida del
doctor Lavalle, siempre ha tenido esa voluntad de amar,
siempre buscando al paciente. Su curiosidad intelectual
es terrible, ésa es una de sus herencias, en micología eso
es muy bueno.”
Alexandro Bonifaz
Palabras del doctor Pedro Lavalle
Cuando recibí el programa del cuarto diplomado, a
medida que avanzaba la lectura me iba emocionando
cada vez más, esa intensa emoción que me provocó este
programa no era solamente por el hecho de que Rubén
López tuvo la generosidad de poner mi nombre a este diplomado,
sino la estructura de este programa. Me llamó
mucho la atención lo completo del mismo, no había un
resquicio que faltara, era todo micología bien estructurado...
muy bien planeado, los ponentes adecuados y entonces
yo me decía a mí mismo, qué lástima que actualmente
yo tengo limitaciones en algunas facultades, la vista, si no
fuera por estas limitaciones yo me habría inscrito a este
diplomado, como alumno por supuesto, y estoy seguro de
que habría aprendido, porque aprender se puede hacer
a cualquier edad, en todo momento, sobre todo cuando
uno ama, es como si se dijera una pista del mundo de la
micología a los 84 años.