2017, Número 2
Med Int Mex 2017; 33 (2)
Calidad de vida en hemodiálisis y diálisis peritoneal tras cuatro años de tratamiento
López y López LR, Baca-Córdova A, Guzmán-Ramírez PM, Ángeles-Acuña A, Ramírez-del Pilar R, López-González DS, Copca-Nieto DV, Santillán-Fragoso WJ, Lagunas-Alvarado M, Lázaro-Figueroa J, Reyes-Jiménez AE, Alba-Rangel DL, Terán-González JO, Castro-D’Franchis LJ
Idioma: Español
Referencias bibliográficas: 0
Paginas: 177-184
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RESUMEN
Antecedentes: la hemodiálisis y diálisis peritoneal corrigen algunos síntomas del paciente provocando cambios en el estilo de vida. Hay estudios que demuestran mejor calidad de vida con diálisis peritoneal comparada con hemodiálisis. La escala Kidney Disease Quality of Life (KDQOL SF 36) evalúa adecuadamente la calidad de vida.Objetivo: demostrar mayor puntaje en la escala de calidad de vida en pacientes con diálisis peritoneal por más de cuatro años comparados con pacientes en hemodiálisis.
Material y Método: estudio observacional, transversal, descriptivo y multicéntrico, realizado del 1 de abril al 31 de mayo de 2016. Se utilizó la escala KDQOL SF 36 en pacientes en diálisis peritoneal o hemodiálisis en el Hospital Central Norte y Regional Poza Rica. Los resultados se compararon con t de Student y χ2.
Resultados: se observaron efectos mentales en 39.5% del grupo de diálisis peritoneal vs 47% en hemodiálisis, p 0.05; efectos físicos en 34% de diálisis peritoneal vs 35% en hemodiálisis, p 0.758; carga de la enfermedad renal en 27% en diálisis peritoneal vs 46% en hemodiálisis, p 0.03; efectos de la enfermedad renal en 61% en diálisis peritoneal vs 55% en hemodiálisis, p 0.391; síntomas en 71% en diálisis peritoneal vs 71% en hemodiálisis, p 0.893.
Conclusiones: en pacientes con diálisis peritoneal el puntaje es mejor que en pacientes en hemodiálisis en cuanto a efectos de la enfermedad renal. También se observó menor puntaje en pacientes en diálisis peritoneal vs hemodiálisis en carga de la enfermedad renal, área de efectos mentales, efectos físicos y área de síntomas, sin diferencia estadística. Tampoco hubo diferencia significativa en diálisis a largo plazo (más de cuatro años) entre ambos grupos. Por tanto, el médico y el paciente deben encontrar la modalidad de diálisis que se ajuste mejor a sus necesidades y estilo de vida.