2002, Número 2
Arch Cardiol Mex 2002; 72 (2)
Cardiología y la ciencia básica. ¿Qué sigue haciendo falta?
Montaño ELF
Idioma: Español
Referencias bibliográficas: 11
Paginas: 97-98
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FRAGMENTO
Se define como conocimiento básico al complejo de teorías científicas generalmente aceptadas y bien establecidas en alguna etapa de la historia. Cuando alguna persona “reta” con una nueva teoría el conocimiento, su teoría se convierte en “audaz” ya que sus afirmaciones son improbables a la luz del conocimiento básico de la época. Este enfrentamiento es lo que el filósofo Althusser denomina “crisis”, que genera en los individuos afectados tres diferentes respuestas: me mantengo en la ciencia, me convierto en filósofo, me transformo en una quimera de las dos anteriores.1 La historia de la humanidad está llena de ejemplos de “crisis” que transformaron el pensamiento y el curso de la época. Cómo olvidar la astronomía que Copérnico sugirió en 1543 y que revolucionó las creencias religiosas de la época, o más reciente, la “Teoría dinámica del campo electromagnético” que propuso en 1864 el físico Maxwell y gracias a la cual Einstein pudo enunciar en 1915 la “Teoría general de la relatividad”.2 En el área de la biología también han existido grandes personajes cuyas observaciones han modificado el conocimiento, recordemos a Gregor Mendel, cuyos trabajos fueron reconocidos tiempo después de su muerte, tanto que se le considera un científico post mortem.3 La cardiología también ha sido profundamente transformada por individuos con un enfoque diferente al aceptado en su época. Un ejemplo muy cercano a nosotros lo tenemos en el Dr. Ignacio Chávez Sánchez, fundador en el año de 1944 de nuestro Instituto. La visión que tenía el Dr. Chávez era la de vivir a tono con el pensamiento científico de hoy, no con el de ayer, y en el concierto universal de las ideas, ser una voz y no un eco.REFERENCIAS (EN ESTE ARTÍCULO)