2008, Número 2
Rev Mex Urol 2008; 68 (2)
Derivación de las vías urinarias inferiores; revisión de 10 años en el Centro Médico Nacional “20 de Noviembre”, ISSSTE
Consuegra-Girón J, Morales-Covarrubias J, Cortez-Betancourt R, Guzmán-Hernández F, Velarde-Carrillo A, Sánchez-Gutiérrez F, Vásquez-Flores A
Idioma: Español
Referencias bibliográficas: 10
Paginas: 88-97
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RESUMEN
Las técnicas quirúrgicas empleadas para la realización de una derivación de la vía urinaria inferior, son múltiples, como también lo son las indicaciones para la misma. Nuestro centro hospitalario no ha sido la excepción al empleo de esta herramienta quirúrgica como tratamiento para casos complejos del sistema urinario inferior.Material y métodos: Se ubicaron 52 pacientes en las especialidades de Urología, Oncología quirúrgica y Cirugía pediátrica, de los cuales, 41 reunieron las características requeridas para el estudio en su historia clínica y a quienes se les revisó: el tipo de derivación, la indicación para la misma, las complicaciones encontradas, la función renal pre y posoperatoria y su seguimiento.
Resultados: Se incluyeron 41 pacientes, 23 masculinos (56%), 18 femeninos (44%), con promedio de edad de 57 años, 3 menores de 11 años. Los tipos de derivaciones realizadas fueron: 27 Briker (66%), 6 Miami (15%), 3 Mitrofanoff (7%), 3 ureterostomías (7%), y 2 Indiana (5%). Indicaciones encontradas: Ca células transicionales de vejiga (CCTV) estadio T2: 26 pacientes (63%), T1 recidivante o multicéntrico: 5 pacientes; 4 por Ca colon y recto, 2 por estenosis de uretra, 1 por microcisto, y 1 por Ta (Oncología). Las complicaciones: 12 pacientes sin complicación reportada (29%); Uropatía obstructiva: 6 (15%); metabólicas 6: (15%); fístula enterocutánea: 5 (12%); fístula urinaria: 4 (10%); IRC: 3 (7%); fístula vesicocutánea: 2 (5%); Hemorragia transoperatoria: 2 (5%). Hemorragia de la pared, migración de catéter central, hernia paraestomal, obstrucción intestinal, catéter JJ migrado, fístula neovejiga-vaginal, sepsis, hernia incisional, exclusión renal, fístula ileovesical, con 1 caso reportado por evento. Cinco pacientes fallecieron durante el posoperatorio inmediato por diferentes complicaciones.
Conclusión: El conducto ileal o Bricker fue la derivación más utilizada, siendo el cáncer vesical la principal indicación para la misma. La función renal se vio alterada desde el primer año. Se deben de revisar las técnicas de reimplante ureteral (en el servicio de Urología), anastomosis intestinal y longitud del conducto (en el servicio de Oncología), debido a los casos de uropatía obstructiva, fístula enterocutánea y problemas metabólicos encontrados, respectivamente.
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