medigraphic.com
ISSN 2594-3006 (Digital)
ISSN 2007-1752 (Impreso)
Archivos de Medicina de Urgencia de México

2024, Número 1

<< Anterior Siguiente >>

Arch Med Urg Mex 2024; 16 (1)


Delta cloro como predictor de mortalidad en estado de choque

Ríos-Jaimes F, Vara-Salgado NA, Villarreal-Ríos E

Idioma: Español
Referencias bibliográficas: 21
Paginas: 22-26
Archivo PDF: 191.48 Kb.


RESUMEN

Introducción. El choque es una entidad que amerita tratamiento agresivo, los cristaloides son una opción, no obstante, pueden generar efectos adversos como la hipercloremia que se ha relacionado con mayor mortalidad.
Objetivo. Determinar el ΔCl- como predictor de mortalidad en pacientes con choque tratados con reanimación hídrica en el servicio de urgencias.
Material y métodos. Cohorte retrospectiva en expedientes de pacientes con choque tratados con cristaloides en urgencias. Grupo expuesto, ΔCl- de 4 o más mEq/L a las 24 h, y grupo no expuesto, ΔCl- menor a 4 mEq/L a las 24 h. El ΔCl- se determinó con la diferencia de Cl- sérico al ingreso, y a las 24 h. El motivo de egreso se identificó como defunción o mejoría. El análisis incluyó prueba de mann-whitney, chi2, riesgo relativo e intervalo de confianza para riesgo relativo.
Resultados. En choque séptico en el grupo de ΔCl- de 4 o más mEq/L a las 24 h la mortalidad fue 57.7% y en el grupo ΔCl- menor a 4 mEq/L a las 24 h la mortalidad fue 13.0%, (chi2= 10.46, p= 0.001). Por cada 4.24 pacientes con ΔCl- de 4 o más mEq/L que mueren, existe un paciente con ΔCl- menor a 4 mEq/L que también muere, (RR=4.24 (IC 95%; 1.46-13.33)). ΔCl- no se identificó como predictor de mortalidad en choque hipovolémico no hemorrágico (chi2=0.56, p=0.453), ni en choque hipovolémico hemorrágico (chi2=0.03, p=0.849).
Conclusión. ΔCl- es predictor de mortalidad en choque séptico, pero no en choque hipovolémico.


REFERENCIAS (EN ESTE ARTÍCULO)

  1. Guyton A, Hall J. Tratado de fisiología médica. 12th ed. Barcelona, España; 2011.

  2. Garnacho-Montero J, Fernández-Mondéjar E, Ferrer-Roca R, Herrera-Gutiérrez ME, Lorente JA, Ruiz-Santana S, et al. Cristaloidesy coloides en la reanimación del paciente crítico. MedicinaIntensiva, 2015; 39(5):303–15.

  3. Standl T, Annecke T, Cascorbi I, Heller AR, Sabashnikov A, TeskeW. The Nomenclature, Definition and Distinction of Types of Choque.Deutsches Ärzteblatt international, 2018; 9.

  4. Scheingraber S, Rehm M, Sehmisch C, Finsterer U. RapidSaline Infusion Produces Hyperchloremic Acidosis in PatientsUndergoing Gynecologic Surgery .Anesthesiology,1999;90(5):1265–70.

  5. Neyra JA, Canepa-Escaro F, Li X, Manllo J, Adams-Huet B,Yee J, et al. Association of Hyperchloremia With Hospital Mortalityin Critically Ill Septic Patients. Critical Care Medicine,2015;43(9):1938–44.

  6. Yunos NM, Bellomo R, Hegarty C, Story D, Ho L, Bailey M. AssociationBetween a Chloride-Liberal vs Chloride-Restrictive IntravenousFluid Administration Strategy and Kidney Injury in Critically IllAdults. JAMA, 2012;308(15):1566.

  7. Charry JD, Bermeo JM, Montoya Kevin F, Calle-Toro JS, NúñezLR, Poveda G. Índice de choque como factor predictor de mortalidaden el paciente con trauma penetrante de tórax. Rev ColombCir, 2015; 30(1):24-28. http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S2011-75822015000100004&lng=en.

  8. Lavadenz Cuentas LA, Pérez Chacón ME, Corrales Vargas V,Winder-Aguilar HR. Diferencia veno-arterial de dióxido de carbonocomo predictor de mortalidad en pacientes en estado de choque, enTerapia Intensiva del Hospital Viedma, junio 2013-enero 2014. RevCient Cienc Méd, 2014; 17(2):14-18. http://www.scielo.org.bo/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1817-74332014000200004&lng=es.

  9. Jasso-Contreras G, González-Velázquez F, Bello-Aguilar L, et al.Lactate levels as a predictor of mortality in patients with septicchoque. Rev Med Inst Mex Seguro Soc. 2015;53(3):316-321.

  10. Ocelotl Pérez R, Valle Ramírez J, De Jesús Balcazar D, CortésMunguía JA, Herrera Morales BE, Mendoza Rodríguez M. Deltade CO2 como factor de riesgo de muerte en choque séptico RevAsoc Mex Med Crit y Ter Int, 2016;30(1):30-42

  11. Martínez M, Sánchez J, Peniche K, Martínez E, Gutiérrez Á, CalyecaM. Delta de cloro (ΔCl-) sérico como pronóstico de mortalidaden pacientes con choque séptico. Medicina crítica (ColegioMexicano de Medicina Crítica), 2019;33:66–72.

  12. Cecconi M, de Backer D, Antonelli M, Beale R, Bakker J, Hofer C,et al. Consensus on circulatory choque and hemodynamic monitoring.Task force of the European Society of Intensive Care Medicine.Intensive Care Medicine, 2014;40(12):1795–815.

  13. Vincent J-L, de Backer D. Circulatory Choque. New England Journalof Medicine, 2013;369(18):1726–34.

  14. Landry D, Oliver JA. The pathogenesis of vasodilatory choque.The New England Journal of Medicine, 2001;345(8):588–95.

  15. Cannon JW. Hemorrhagic Choque. New England Journal of Medicine,2018;378(4):370–9.

  16. Miranda G. La atención de urgencias: ¿Una cadena de vida? Archivosde Medicina de Urgencias de México ,2012;4(3):93–5.

  17. O’Dell E, Tibby SM, Durward A, Murdoch IA. Hyperchloremia isthe dominant cause of metabolic acidosis in the postresuscitationphase of pediatric meningococcal sepsis*. Critical Care Medicine,2007;35(10):2390–4.

  18. Lobo DN, Awad S. Should chloride-rich crystalloids remain themainstay of fluid resuscitation to prevent ‘pre-renal’ acute kidneyinjury?: con. Kidney International, 2014;86(6):1096–105.

  19. Song K, Yang T, Gao W. Association of hyperchloremia withall-cause mortality in patients admitted to the surgical intensivecare unit: a retrospective cohort study. BMC Anesthesiology,

  20. 2022;22(1):14.20. Yunos NM, Bellomo R, Hegarty C, Story D, Ho L, Bailey M. AssociationBetween a Chloride-Liberal vs Chloride-Restrictive IntravenousFluid Administration Strategy and Kidney Injury in Critically IllAdults. JAMA, 2012;308(15):1566.

  21. Chowdhury AH, Cox EF, Francis ST, Lobo DN. A Randomized,Controlled, Double-Blind Crossover Study on the Effects of 2-LInfusions of 0.9% Saline and Plasma-Lyte® 148 on Renal BloodFlow Velocity and Renal Cortical Tissue Perfusion in Healthy Volunteers.Annals of Surgery, 2012;256(1):18–24.




2020     |     www.medigraphic.com